miércoles, 12 de septiembre de 2012

MY FAIR LADY en BILBAO


MY FAIR LADY en el ARRIAGA de BILBAO

El Arriaga en sí, es ya solo un motivo de encanto…ascender por su lujosa escalera con alfombra de una sola pieza y acomodarte en sus butacas que crearon modelo a la propia empresa suministradora; es decir hay un modelo de butaca que algunos teatros no solo de aquí, sino también de allá, albergan una butaca similar a la que originalmente nació en el Arriaga. O sea Modelo Arriaga 5038.
Acomodados con la amabilidad y profesionalidad del personal de sala, escuchamos expectantes la intro que en directo y desde el foso, crea esa mágica ambiente que dan las cosas “In situ” en directo que decía José María Iñigo.
Sobre el escenario…My Fair Lady, protagonizada por Paloma San Basilio y que ya lo hiciera hace unos años cuando la vi en la Gran Vía Madrileña. El recuerdo que tenia, era muy similar al que vi a medida que trascurrían las canciones y las coreografías, pero esta vez… y quizás por eso que los psicólogos llaman el acto reflejo… ver la cara bobalicona de mis hijas, sorprendiéndose con los vestuarios, con las luces y la nueva tecnología que permitía oír casi el maullido de ese gato que sobre una ventana. Esto me hace entusiasmarme más y quizás perder la objetividad de un musical que sin pasar del notable, es vistoso, sorprendente, ágil, efectivo, pero sobre todo….Muy entretenido.
Jaime Azpilicueta, que ya dirigiera hace más de diez años a Paloma con la que tiene una gran relación, sabe adaptar el paso del tiempo y deja en la parte trasera del escenario, gran parte del merito y consigue poner en pie al publico al finalizar la función.
Sin desgranar uno a uno los intérpretes que esta todos muy bien, y con la orquesta que sabe tener presencia sin llamar la atención, hasta cada uno de las personas que forman parte de este equipo técnico, consiguen hacer pequeño un gran teatro como el Arriaga, cuando en algunos números desbordan la escena.
Una obra recomendable que deja Bilbao, para irse hasta Salamanca y continuar su gira. Una obra que permite encandilar al público y crear escuela y gusto sobre los más pequeños. Una obra que quizás, dentro de diez años pueda volver a representarla Paloma San Basilio que esta salvajemente joven y que permite una credibilidad en el personaje un poco descuidada en otras funciones.
@jabiercalle
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